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La planta de Residuos de Construcción y Demolición (RCDS) de Ciudad Real estará operativa este verano, así lo ha asegurado el responsable técnico de la planta que está ejecutando la UTE Segema-Urbaja, a los empresarios del sector de la construcción que han visitado las instalaciones invitados por la empresa y que han contado con la compañía de la alcaldesa capitalina y el concejal de Sostenibilidad, interesados también en conocer el desarrollo de esta nueva infraestructura.

La planta de RCDS de Ciudad Real será la más importante y puntera en el tratamiento de residuos procedentes de la construcción de toda Castilla-La Mancha y tendrá capacidad para tratar 70.000 toneladas al año de rcds. Como ha destacado la alcaldesa, proyectos como este son los que van a hacer de Ciudad Real una ciudad de referencia en sostenibilidad, en este caso, en el reciclaje de residuos.

Rosa Romero ha recordado que la planta de RCDS, está promovida por el Ayuntamiento de la capital que ha cedido el suelo para su construcción, y que aunque no es una competencia municipal, si era una responsabilidad porque esta infraestructura ayudará a la preservación del medio ambiente y al sector de la construcción, un sector clave que está padeciendo de forma muy especial la crisis, y que necesita por tanto del apoyo de las Administraciones.

Además, la primer edil ha recordado la inversión de la planta, más de 3 millones de euros, y todas las actuaciones del Ayuntamiento en fomento del reciclaje, como el soterramiento de contenedores y el reciclado de aceites domésticos, actuaciones que están facilitando, ha dicho, que los ciudadanos puedan reciclar.

Nosotros si sabemos la ciudad que queremos y tenemos muy claro el modelo de ciudad que queremos para que participen todos los ciudadanos, incluidos los constructores locales, que hoy pueden estar satisfechos con esta nueva infraestructura que vamos a poner a su disposición, ha concluido Rosa Romero.

Por su parte, el concejal de Sostenibilidad, ha explicado que esta planta se ha hecho por una orden europea que dice que en 2009 todos los vertederos y escombreras tenían que estar cerrados, y que el Ayuntamiento adelantándose a este normativa, en julio de 2007 presentó ya el proyecto, un proyecto, que como ha recordado Caballero ha sufrido múltiples retrasos por culpa de las numerosas trabas que la Junta de Comunidades ha ido poniendo hasta diciembre de 2010 que pudieron comenzar las obras. Según el responsable municipal del área de Sostenibilidad, estos retrasos han repercutido negativamente en los empresarios, que han tenido que transportar los materiales a otras localidad con el consiguiente coste económico para ellos.

Por lo que respecta a la planta de RCDS y como ha explicado su responsable técnico, Javier Cepeda, ésta, gestionará tanto el escombro sucio como el limpio, y consta de una planta de tratamiento y otra de acopio y una nave taller de 150 metros cuadrados que también acogerá residuos peligrosos. En la planta de RCDS también se van a recoger voluminosos y posiblemente otra serie de materiales que los constructores demanden.